Translate

martes, 27 de mayo de 2014

Actitud personal (del cirujano) mental:


1.- Una buena cirugía depende de la combinación de una toma de decisiones adecuada y de una realización técnica cuidadosa.
2.- Las operaciones se deben realizar en una atmósfera relajada de control de la situación. Cada paso debe seguir su orden, se debe completar y comprobar antes de seguir al siguiente.
3.- No debe permitir que acontecimientos o catástrofes inesperados le hagan perder el control.
4.- En la mayoría de los casos, la mejor respuesta es la tranquilidad; no hay necesidad de acelerarse sin sentido para "hacer algo".
5.- Con frecuencia resulta útil comentar y discutir las dificultades con el equipo, ya que así también podrá aclarar sus ideas.
6.- El pánico es infrecuente; la mayoría de los errores derivan del empecinamiento en proseguir con las técnicas previstas, en lugar de adaptarse a las circunstancias cambiantes.
7.- Algunos "personajes" sólo se desenvuelven bien en una atmósfera de tensión y drama. Esta imagen se suele asociar con la idea que el público tiene de un cirujano en acción. Sólo merece la pena mencionarlos porque cada día son más raros. Los cirujanos que consideramos este comportamiento repulsivo tratamos a toda costa de evitar a este tipo de colegas.
8.- Nunca se deben perder de vista los objetivos. Se debe evitar embarcarse en procedimientos innecesarios, sobre todo en situaciones de urgencia.
9.- Asegúrese de que podrá justificar sus decisiones ante los pacientes, los compañeros y, sobre todo, ante usted mismo; esta medida es de especial importancia cuando se decide seguir un procedimiento heterodoxo.

[Técnicas quirúrgicas básicas. 2003 R.M.KIRK 5ªEd.]

domingo, 18 de mayo de 2014

Buen Viaje, Amigo:

Esta semana ha sido especialmente difícil para mi... Podría pasar y hablar de las indicaciones de la laparoscopia en la cirugía de la apendicitis aguda, o del triunfo liguero de mi Atletico de Madrid después de 18 años... Pero voy a hablaros de algo que en estos momentos me toca mucho más la patata...

Hace unos meses tomé la decisión de acoger en mi casa a un nuevo amigo. Un simpático peludo, más noble que la gran mayoría de las personas que he conocido.
Fui a una protectora, y me traje a casa al que según ellos más lo necesitaba (quitando una gatita diabética a la que por horarios no podría atender como se merecía). Lo acabé llamando Tinto, por ese color brillante que tenía cuando le daba el sol... En principio se trataba de una acogida, mientras le encontraban casa definitiva.

Recuerdo el primer día que llegó a casa. Se escondió debajo del sofá y sólo salía llamado por la comida... Estaba muerto de hambre, y después de posiblemente muchos años en la calle (la veterinaria dijo que era un abuelito), ni se fiaba mucho de las personas ni el pienso era su comida favorita...


Pero se fue recuperando, y poco a poco se convirtió en la alegría de la casa. Siempre salía a saludar, se despedía de mi por las mañanas y cada vez que salía de guardia se quedaba a mi lado en el sofá durmiendo las horas que hiciera falta (como era viejito, tampoco tenía muchas ganas de jugar y destrozar cosas). Curado de su neumonía, de su otitis, y de su conjuntivitis que no tardó mucho en recidivar, resultó que tenía inmunodeficiencia felina o FIV. Para el que no lo sepa (yo ni idea del tema hasta ese día, en que me empapé todo lo que encontré en PubMed, y algún que otro foro) es un virus similar al de VIH, pero en gatos, y de transmisión entre gatos. Sin problema porque, una vez recuperado de todas sus enfermedades callejeras, estaba asintomático, quitando que de vez en cuando estornudaba, que no sé si tendría algo que ver. En general, diría que era un gato muy tranquilo, y al menos parecía feliz...

Llegó en calor y cambio su hambre voraz por inapetencia, lo que me preocupó cuando no quiso comer el atún que tanto le gustaba... En fin, hace 4 días, saliente de guardia, me pareció muy pachucho y lo llevé a urgencias, que como dato informativo, para el que se queje de la sanidad pública, diré que me costó 227€ que le cogieran una vía, le sacaran una analítica y le pusieran sueros. Resultó que estaba en cetoacidosis diabética (por si no tenía bastante)... La verdad es que para el diagnóstico que me esperaba, hasta fue un alivio, y se quedó ingresado yo pensé que mejoraría rápido con la sueroterapia...

Pero una vez más, la vida no es como uno quiere que sea, es como es. Y 48 horas después mi pequeño amigo peludo no sólo no había mejorado, sino que había hecho un fallo hepático. La ictericia y la coluria que tantas veces he visto, que tanto he estudiado, me dolieron mucho más... Casi no podía moverse... Y eso sí que no iba a permitirlo, porque si alguien no se merece sufrir es ese pequeño sin atisbo de maldad... Y me tocó tomar una decisión difícil. Hice por él lo que quisiera que alguien hiciera por mí, llegado el momento...

En fin, perdón por la sensiblería, pero es increíble lo que puede llegar a quererse a un bichito de 3 kg y 4 patas... Al menos se que por un tiempo fuiste feliz...

Gracias por haber hecho mi mundo un poquito mejor cada día.

Y para todo el que dude después de esta entrada si mereció la pena, les diré que es la mejor decisión que he tomado en los últimos años. Os dejo un link de la protectora en que yo lo encontré, por si alguien quiere echar una mano, al final, recibes mucho más de lo que das: http://www.rivanimal.org/

lunes, 5 de mayo de 2014

Smartphones: Fredoom or Captivity?

After been just a few days without my Iphone, due to an accident, I have had enought time to wonder why It has became so important...


On one hand, I have the opportunity to connect myself everybody, everywhere, not making a single effort. But In the other hand, It is reciprocal. Everyone can find me wherever. Even they can now, If I was asleep or checking my whatsapp messages at 3 O'clock in the morning.

Smartphones make yourself available, no matter what you are doing. Your phone number can be introduced in everyone's smartphone, and your personal profile and photos are freely available.

The point is... Are we using our tools properly?

Let`s make a proof...What about living a week withouth our smartphones? We would feel disabled or released?

Anyone who dares to do it?

Let it be

Hay letras que nunca pasarán de moda:



paper blog

Seguidores