La verdad es que en estos meses de sequía literaria (por llamarlo de alguna manera), ha habido mil ideas que pasaban por mi cabeza queriendo plasmarse de alguna manera por este cuaderno de notas. Al final, por pereza, por dejadez, por procrastinar mas de la cuenta y por robarle a Morfeo mas horas de las que estaba dispuesto a darme la mayoría de las veces me acosté pensando que... Quizás mañana.
Miles de personas participan en la Marea Ciudadana de Madrid
Hoy veía las noticias, que varían poco en los últimos meses, si me apuras años. Y me preguntaba que coño hemos hecho los españoles para merecer el sitio en el que estamos hoy en día. Y lo digo yo, que nunca pedí un crédito ni una hipoteca que no pudiera pagar, que estudié primero a base de becas y luego gracias a las horas de trabajo que hicieron mis padres, que hoy, ni con esas podría pagarme lo que cuesta la misma carrera que ya ejerzo. Me desgarra el alma cada vez que veo la cifra de parados (y eso que la maquillan bastante) muchos de ellos con muy buena formación. Y es que la crisis ya no es algo etéreo. Cada cual conoce algún caso de parados, desahucios, o personas dependientes que no pueden salir adelante.
Mientras tanto cada día vemos salir en las noticias impunemente a alguno de los desgraciados que robó el dinero que muchas familias habían ahorrado. Políticos acusados, procesados, que continúan en su cargo, en ocasiones ganando mas de un sueldo. Y cada vez más recortes. Recortes en libertades que no volverán, y que si lo hacen tardarán mucho en llegar. Y si quieres quejarte al sistema judicial (cuyos altos cargos son puestos por dedocracia según el gobierno de turno, que menuda independencia de poderes) ya puedes ir preparando el monedero. Y aquí no pasa nada. A la mierda la planificación familiar, porque hasta la libertad de tener o no unos hijos que a lo mejor no tienes forma de educar nos va a venir impuesta.
Y mientras tanto, un montón de gente haciendo las maletas. Personas que buscan suerte en otro lugar. El mismo sueño americano o europeo de los espaldas mojadas. Porque igual es que ya la vista la tengo cada vez peor, pero me cuesta distinguir cada vez más entre la república bananera en la que nos estamos convirtiendo y alguna otra de por ahí.
En fin, demasiadas ideas desorganizadas en este espacio después de tantos meses. Intentaré ser más positiva y ordenarlas en entradas sucesivas. Pero no prometo nada...
Saludos a todos los caminantes.
