El otro día estaba haciendo un curso del NCCN sobre tumores colorrectales metastásicos. Me llamaba la atención, que en las simulaciones se preguntara al paciente sobre el tipo de quimioterapia que prefería.
¿Prefiere QT oral? ¿Trabaja de cara al público y le importan los efectos secundarios visibles? ¿Prefiere la terapia de mayor intensidad sin importar los efectos secundarios? ¿Cuáles son sus prioridades?
La verdad es que en España no te lo planteas, porque para eso están los oncólogos. Me gustaría que algún paciente que pasara por aquí me dijera si le preguntaron cuáles eran sus preferencias, también en cuanto a las opciones quirúrgicas.
La sensación que he tenido (y la sensación, como siempre es algo personal y subjetivo) es que aún se sigue haciendo medicina paternalista en España. Se sigue decidiendo por el paciente porque no se le considera capaz de tomar sus decisiones. Y por otra parte creo que al paciente no le importa delegar esa responsabilidad en alguien que considera más preparado para hacerlo. Yo he llegado a encontrarme pacientes en la puerta de quirófano que decían no saber de que iban a operarse, y a pesar de haber firmado en consentimiento afirmaban que nadie les había informado de la posibilidad de llevar un estoma. Cansada de escuchar en las sesiones clínicas aquello de "el paciente va a hacer lo que tú le digas". Me llama la atención y me gusta ver que se puede hacer de otra manera.
Porque considero que parte de mi trabajo es darle al paciente la suficiente información para que pueda tomar sus decisiones de acuerdo a su patología, comorbilidades, creencias personales y situación socio-familiar. Porque sus circunstancias son las suyas, y no las mías. Y creo firmemente en la autonomía de cada individuo para poder decidir.
¿Se han sentido escuchados por sus médicos?
Hola!
ResponderEliminarSigo tu blog desde hace tiempo, pero creo que no me había dado por comentar.
Enhorabuena por haber terminado la residencia!!
Creo que es muy cierto lo que dices. No sé si es porque la gente tiene miedo a preguntar por diversos motivos, porque tienen "miedo" de que el cirujano les diga algo, o porque piensan que digan lo que digan, los profesionales sanitarios van a hacer lo que ellos estimen oportuno.
Como bien dices, creo que hay que dar la oportunidad a saber, a conocer. Las cosas bien explicadas, sea al nivel que sea, se entenderán mejor que si no se explica nada. Supongo que esto depende de nosotros, y debemos ser nosotros los que cambiamos esto y no dejarnos arrastrar por como se han hecho las cosas hasta ahora.
Un beso.
Bienvenida Marina:
EliminarA juzgar por tu última entrada diría también que bienvenida al mundo de la cirugía general ;) Sin duda el mejor de los trabajos que uno puede tener, pero eso te lo contesto en tu blog en un rato.
Efectivamente, está en nuestras manos. El paciente no tiene porque saber. Pero nosotros hicimos un juramento al acabar la carrera. Estamos en la obligación moral de hacer nuestro trabajo bien. Y eso no es decidir por el paciente, sino, con el paciente.
Nunca me dejé arrastrar, pero te avanzo que ser mujer en el universo machista de la cirugía general y con la mentalidad obsoleta de algunos Reinos de Taifas hospitalarios y sus caudillos no es nada fácil...
Un abrazo y gracias por el comentario