En estos últimos años he conocido bastantes gatos. Y ninguno de ellos se parecía al anterior. Cada uno especial, cada uno mágico. Cada uno contándote una historia sin necesidad de usar las palabras para esconderse en ellas.
Al volver a España me sorprende la cantidad de gatos callejeros que encuentro. La gente piensa que por ser autosuficientes pueden tenerlos en casa y echarlos a la calle cuando se cansan de ellos. Pues déjenme decirles que nada más lejos de la realidad. Los gatos son más sensibles que la mayoría de humanos que he conocido. Lo pasan mal. Se deprimen, y les cuesta adaptarse, aunque hayan nacido para cazar. Me sorprende la falta de interés de los ayuntamientos. Me indigna la legislación que permite coger a uno y pegarle impunemente un tiro para que muera en sitios como Castilla la Mancha, mientras que dificulta campañas de control como el método CES (Capturar, Esterilizar y Soltar).
Me da esperanza que en sitios como Cataluña proliferen los veterinarios solidarios, viendo la diferencia con la legislación entre comunidades yo también pediría la independencia si fuera ellos.
Y hay otra cosa que me cuesta mucho trabajo entender. Es el hecho de que muchos amantes de los animales sigan acudiendo a una tienda a encontrarse con su nuevo amigo a fomentar el negocio que los tiene meses en jaulas diminutas, hasta que pagas por ellos y pueden meter a otro. Hay muchísimas protectoras en España. Muchísimos gatos, perros, conejos, y otros animales buscando desesperadamente un hogar y muchos mueren haciéndolo.
No son un juguete. Tener un animal es adquirir una responsabilidad por muchos años. Pero lo que ellos te dan no puede comprarse con todo el dinero del mundo.
Acabo con unos versos de Neruda:
Me encanta totalmente...
ResponderEliminarYo soy muy gatera... todos mis gatos han sido/son "callejeros". Cada uno diferente. Todos perfectos.
Precisamente el otro día leí un comentario tuyo en un blog de gatos y decidí que sin conocerte personalmente me caes muy bien ;)
ResponderEliminarHazme saber si buscas una nueva peluda con la que ampliar la familia que conozco a una preciosidad que está buscando casa.
Un saludo.
Soy yo... (la misma Irene... jaja) Yo nunca busco... pero siempre encuentro... Todos mis gatos fueron "no deseados"...Y todos se conviertieron en mi mejor motivo para llegar a casa (por encima del sofá!!!! jajaja)
ResponderEliminarVivo en un piso pequeño. Con dos. De momento no quiero familia numerosa, pero sé que si en el camino se me cruza otro/otra... en la calle no se va a quedar...Luego ya veré si lo adopto o no.... (nunca se dio el caso que no..., en cuento les pongo nombre, se acabó... y les pongo nombre antes de que entren por la puerta... jaja Ays... la carne es muy débil)
¡Ja ja! Me hace gracia porque la misma conversación tuve con mi hermana la semana pasada, después de ponerle nombre a otra gata... ;)
ResponderEliminarUn abrazo y gracias por pasar por aquí y dejar tu huella.