Haciendo la maratón de última hora, a pocas horas del exámen acabo de encontrarme esto en mi correo y he pensado en compartirlo a ver que os parece. Fue publicado en XL semanal
"Permitidme tutearos, imbéciles
Cuadrilla de golfos apandadores, unos y otros. Refraneros casticistas analfabetos de la derecha. Demagogos iletrados de la izquierda. Presidente de este Gobierno. Ex presidente del otro. Jefe de la patética oposición. Secretarios generales de partidos nacionales o de partidos autonómicos. Ministros y ex ministros –aquí matizaré ministros y ministras– de Educación y Cultura. Consejeros varios. Etcétera. No quiero que acabe el mes sin mentaros –el tuteo es deliberado– a la madre. Y me refiero a la madre de todos cuantos habéis tenido en vuestras manos infames la enseñanza pública en los últimos veinte o treinta años. De cuantos hacéis posible que este autocomplaciente país de mierda sea un país de más mierda todavía. De vosotros, torpes irresponsables, que extirpasteis de las aulas el latín, el griego, la Historia, la Literatura, la Geografía, el análisis inteligente, la capacidad de leer y por tanto de comprender el mundo, ciencias incluidas. De quienes, por incompetencia y desvergüenza, sois culpables de que España figure entre los países más incultos de Europa, nuestros jóvenes carezcan de comprensión lectora, los colegios privados se distancien cada vez más de los públicos en calidad de enseñanza, y los alumnos estén por debajo de la media en todas las materias evaluadas.
Pero lo peor no es eso. Lo que me hace hervir la sangre es vuestra arrogante impunidad, vuestra ausencia de autocrítica y vuestra cateta contumacia. Aquí, como de costumbre, nadie asume la culpa de nada. Hace menos de un mes, al publicarse los desoladores datos del informe Pisa 2006, a los meapilas del Pepé les faltó tiempo para echar la culpa de todo a la Logse de Maravall y Solana –que, es cierto, deberían ser ahorcados tras un juicio de Nuremberg cultural–, pasando por alto que durante dos legislaturas, o sea, ocho años de posterior gobierno, el amigo Ansar y sus secuaces se estuvieron tocando literalmente la flor en materia de Educación, destrozando la enseñanza pública en beneficio de la privada y permitiendo, a cambio de pasteleo electoral, que cada cacique de pueblo hiciera su negocio en diecisiete sistemas educativos distintos, ajenos unos a otros, con efectos devastadores en el País Vasco y Cataluña. Y en cuanto al Pesoe que ahora nos conduce a la Arcadia feliz, ahí están las reacciones oficiales, con una consejera de Educación de la Junta de Andalucía, por ejemplo, que tras veinte años de gobierno ininterrumpido en su feudo, donde la cultura roza el subdesarrollo, tiene la desfachatez de cargarle el muerto al «retraso histórico». O una ministra de Educación, la señora Cabrera, capaz de afirmar impávida que los datos están fuera de contexto, que los alumnos españoles funcionan de maravilla, que «el sistema educativo español no sólo lo hace bien, sino que lo hace muy bien» y que éste no ha fracasado porque «es capaz de responder a los retos que tiene la sociedad», entre ellos el de que «los jóvenes tienen su propio lenguaje: el chat y el sms». Con dos cojones.
Pero lo mejor ha sido lo tuyo, presidente –recuérdame que te lo comente la próxima vez que vayas a hacerte una foto a la Real Academia Española–. Deslumbrante, lo juro, eso de que «lo que más determina la educación de cada generación es la educación de sus padres», aunque tampoco estuvo mal lo de «hemos tenido muchas generaciones en España con un bajo rendimiento educativo, fruto del país que tenemos». Dicho de otro modo, lumbrera: que después de dos mil años de Hispania grecorromana, de Quintiliano a Miguel Delibes pasando por Cervantes, Quevedo, Galdós, Clarín o Machado, la gente buena, la culta, la preparada, la que por fin va a sacar a España del hoyo, vendrá en los próximos años, al fin, gracias a futuros padres felizmente formados por tus ministros y ministras, tus Loes, tus educaciones para la ciudadanía, tu género y génera, tus pedagogos cantamañanas, tu falta de autoridad en las aulas, tu igualitarismo escolar en la mediocridad y falta de incentivo al esfuerzo, tus universitarios apáticos y tus alumnos de cuatro suspensos y tira p’alante. Pues la culpa de que ahora la cosa ande chunga, la causa de tanto disparate, descoordinación, confusión y agrafía, no la tenéis los políticos culturalmente planos. Niet. La tiene el bajo rendimiento educativo de Ortega y Gasset, Unamuno, Cajal, Menéndez Pidal, Manuel Seco, Julián Marías o Gregorio Salvador, o el de la gente que estudió bajo el franquismo: Juan Marsé, Muñoz Molina, Carmen Iglesias, José Manuel Sánchez Ron, Ignacio Bosque, Margarita Salas, Luis Mateo Díez, Álvaro Pombo, Francisco Rico y algunos otros analfabetos, padres o no, entre los que generacionalmente me incluyo.
Qué miedo me dais algunos, rediós. En serio. Cuánto más peligro tiene un imbécil que un malvado."
Reverte siempre me parece algo brusco en la forma. Pero la verdad es que tiene toda la razón. Gente mayor que nosotros, que teóricamente tiene menor nivel académico, nos dan cien mil vueltas en lo que antes se llamaba "cultura general". Hoy los universitarios sabemos a duras penas el rio que pasa por nuestra comunidad, y no somos capaces de tomar unos apuntes sin cometer faltas de ortografía.Tampoco entiendo demasiado bien esa manía de dividir radicalmente las ciencias de las letras: para comprender el mundo son necesarias ambas, y en lo más profundo, la filosofía no es tan diferente de las matemáticas. Por eso la manía de que los chavales tengan que decantarse por opciones de letras o ciencias me parece empobrecedora. En España sería necesario un gran acuerdo en materia educativa. No puede ser que cada gobierno cambie la ley. Pero claro, ya se sabe que cuando la política se mete por el medio...Al final, los que pierden, los mismos.
ResponderEliminarCompletamente de acuerdo, las formas resultan un poco fuertes pero tiene mucha razón. En España están destrozando poquito a poquito la enseñanza, cada nuevo gobierno pone en eso su pequeña miguita de pan. Lo que a mí me resulta más dañino más es que la historia, matemáticas, filosofía etc etc que yo estudié sea diferente a la que estudió Almu, por ejemplo , con eso de que somos de diferentes Comunidades Autónomas.
ResponderEliminarJajajajaja, va ser que Ortega y Gasset tenía rendimiento bajo en lengua y literatura...
ResponderEliminarSinceramente, el sistema educativo aquí es de pena, pero mucho se quejan siempre la gente de que no damos literatura o lengua o historia... y yo pregunto: y biología??? o química???? es que acaso tampoco son importantes???. yo soy de ciencias y he dado latín y griego, cultura clásica, historia, geografía, fiolosofía,... pero me parece igual de inculto que una persona de letras no sepa qué es una celula.
A mi personalmente me encanta leer, disfruto cada palabra, historia o aventura, allá donde desaparencen las letras y la película se va formando en tu mente, más allá del papel, es algo tan increíble que parece magia: estás en el sofá de casa y de repente te trasldas a otro mundo transportado por las letras. Y sin embargo odiaba, pero de verdad, la clase de literatura. me parece bien leer a los clásicos, me gustaba pero lo que no podía soportar era la total y absoluta falta de sentimiento didáctico. Aprenderte las 500 obras del modernismo de memorieta u otras tantas cosas.
Lo de los 17 sistemas de educación es lo peor, como lo de los 17 sistemas de salud, cada comunidad hace lo que le da la gana y encima el dinero que iría destinado para el fin último que es el ciudadano se pierde por el camino en conserjerías, organismos de gobierno y mediadores que no solucionan el problema sino que lo agravan más.
Y otra cosa que quiero comentar es que no pienso que seamos un país de mierda ni el culo de Europa o tantas y tantas cosas que siempre nos decimos a nosotros mismos los españoles. Yo no soy ni patriota, ni facha ni nada de nada, solo ciudadana de este país en el que por suerte o desgracia me ha tocado nacer, y la verdad es que pienso que muchas veces nosotros mismos somos los que pensamos que todo lo que tenemos está fatal, que no sabemos hacer nada bien excepto la siesta, etc etc. Y sin embargo creo que deberíamos recordar a veces que vivimos en lugar que no está tan mal, tenmos la suerte de tener muchos derechos y libertades, de vivir en paz, de ser una de las naciones con más calidad de vida,... mirad los italianos! por dios! si es que ahí no funciona nada y vamos, no les toquees su país que te muerden!.
Pues eso, nada más que me he liado mucho.Jajaja
Sigue escribiendo en el blog!